La Plaza de España (en italiano Piazza di Spagna), es una de las plazas más famosas de la ciudad de Roma. Debe su nombre a Fernando el Católico, quien la mandó a contruir y la regaló. En esta plaza se encuentra la embajada española ante la Santa Sede, la Fontana della Barcaccia, la escalinata que dirige hasta la iglesia de Trinità dei Monti y la sede de la Orden de Malta.